«Una puertecita», eso es lo que se les acaba de abrir a los productores locales españoles que tratan de sacar adelante su negocio desde el medio rural. Una oportunidad real de llegar a los consumidores. Y no solo a aquellos a los que podrían acceder mediante ferias o mercados, sino a todos los que tengan acceso a internet.
La posibilidad de que les conozcan, de que les demanden sus productos y de hacérselos llegar a sus casas en menos de 48 horas. Una ‘súper puerta’, más bien, al alcance de todos los artesanos rurales que elaboran sus productos en España y que utilizan materias naturales. La mayor abierta hasta ahora para tratar deafrontar el reto demográfico impulsando la actividad de sus emprendedores locales.