El comercio electrónico ha explotando durante la pandemia, pero aún puede ser un desafío para los clientes encontrar el producto adecuado sin el «lujo» de un probador físico. Eso está provocando que los consumidores devuelvan en masa la ropa que compran online.
Estas devoluciones se están convirtiendo en grandes gastos para los minoristas. Con las personas en casa durante la pandemia, las devoluciones online aumentaron un 70% en 2020 en comparación con 2019.
A continuación, echamos un vistazo rápido a tres formas en que los minoristas están aprovechando la tecnología para reducir estos costes…